DESATASCOS DURANGO ISURBIDE
En Isurbide prestamos servicios de urgencia y desatascos de tuberías en Durango 24 horas diarias los 365 días del año. Sea cual sea el motivo del atasco, en Isurbide garantizamos siempre la mejor solución.
Nos acercamos a cualquier vivienda o negocio de Durango y alrededores para que la molestia sea mínima, con resultados garantizados. Tenemos 20 años de experiencia en solucionar problemas en tuberías, encontrando su origen y ayudando a llevar un mantenimiento de alcantarillado para evitar futuros problemas. Además, nuestro sistema de agua a presión y producto de limpieza higienizante, desengrasante y desodorizante dejará un rico aroma para tus visitas y/o clientes.
Innovación tecnológica y calidad garantizada
No importa si eres una empresa, una oficina o un hogar, para nosotros no hay labores pequeñas, siempre proporcionamos lo mejor de nosotros mismos para que nuestros clientes queden satisfechos en la resolución de problemas de fontanería en Durango.
Contamos con equipos propios equipados con tecnología punta, lo que nos permite ofrecer el la mayor rapidez y calidad en nuestros servicios – siempre, de la mano de experimentados profesionales fontaneros-.
En Isurbide estamos preparados para ayudarte con el atasco de las tuberías, el alcantarillado y las obstrucciones de baños, cañerías, fregaderos y/o desagües. ¡Porque estamos aquí para ayudarte! Si necesitas una empresa o fontanero para solucioar cualquier problema urgente de tuberias, Isurbide es lo que estás buscando.
Curiosidades del sector
¿Cómo rehabilitar tuberías? Arreglo de tuberías sin zanja
Si tiene problemas con sus tuberías, hay formas de arreglarlas sin necesidad de causar muchos destrozos, infórmese sobre el arreglo de tuberías sin zanja.
Las tuberías de alimentación de agua son de uso habitual y común en urbanizaciones, comunidades de vecinos, zonas industriales o jardines. Sufren un uso constante que va minando su resistencia, pese a que las mantengamos con un cuidado excelente.
Los principales problemas y averías con los que se enfrentan los fontaneros día a día son los derivados de la fricción del agua. El agua, ya sea limpia o residual, sumada a las pequeñas partículas que arrastra, provoca un desgaste continuo de la cara interna de la tubería. Goteras, pequeñas roturas, atascos o, incluso, humedades provienen generalmente del desgaste natural de los materiales del conducto, resultante del paso continuo del agua por su interior.
La avería más preocupante y que mayores contratiempos puede causar en el ámbito de la fontanería es la de una fuga descontrolada de agua. En un caso como este, se hace imprescindible corregir la avería de la manera más inmediata posible. Los expertos recomiendan rehabilitar las tuberías, incluso, si el punto de fuga tiene apenas el tamaño del agujero de una aguja. Para ello, lo habitual siempre había sido cortar la tubería y sustituirla por otra, soldando un acople de tubería normal y manteniendo seco el interior de la tubería.
Sin embargo, debemos distinguir dos hipótesis. Si, al descubrir una fuga de agua, nos encontramos con un conducto raído, oxidado y desgastado por los años, se hace absolutamente necesario sustituir todo el conducto por uno nuevo. Ahora bien, si hemos realizado adecuadamente las tareas de mantenimiento, los desatascos y la limpieza, la tubería probablemente se encuentre en buen estado y no será necesario reemplazarla. Hoy en día, es posible rehabilitar las tuberías y sellar los puntos de fuga sin necesidad de hacer obra, en lo que se conoce habitualmente como la reparación de tuberías sin zanja.
Reparación de tuberías sin zanja: una alternativa eficaz
La reparación de tuberías sin zanja ni obra exterior consiste en localizar el lugar exacto donde se encuentra el punto de fuga o la avería, para después sellarlo recubriendo el interior del conducto con una camisa de fibra de vidrio. La camisa estará impregnada de resina, por lo que quedará adherida a la tubería de tal manera que corregirá eficazmente la fuga de agua. La reparación de tuberías sin zanja es mucho más rápida y menos costosa que la tradicional sustitución de una tubería por otra. Además, podemos aplicarla sobre cualquier material y tiene un impacto positivo en el entorno, ya que no interfiere en los servicios contiguos, simplifica el proceso de rehabilitación del conducto y evita las molestias asociadas al trabajo con zanja. Siempre que la tubería dañada se encuentre en buen estado, la mejor opción será optar por corregir el punto de fuga vía reparación sin zanja.
Si quiere saber más sobre este u otros servicios de fontanería, no dude en contactar con nosotros y pedir un presupuesto sin compromiso.
¿Qué hacer con las fugas de agua?
Las fugas de agua son uno de los principales motivos por los que acabamos solicitando los servicios de fontaneros urgentes.
La verdad es que en muchos casos la reparación de tuberías no es algo tan complicado si tenemos unos mínimos conocimientos sobre cómo hacerlo. Por lo tanto, es recomendable que aprendamos lo básico sobre reparaciones de fontanería.
En muchos casos, la reparación de fugas de agua, sin tener que recurrir a un profesional, no es imposible si la avería no es excesivamente grave. Incluso conocer el procedimiento puede ayudarte a solucionar la papeleta mientras consigues que venga un profesional para solucionar los problemas más importantes.
Para empezar, es importante que tengas en cuenta el material que vas a necesitar para arreglar una fuga de agua en tu casa: cinta de caucho, trapos, pegamento epóxido, una abrazadera, una cinta adhesiva apta para su uso en agua, equipo para soldar y un trozo de tubería nueva. Asegurarte de que tienes todos estos elementos a mano te permitirá emprender la reparación con las mayores garantías posibles.
Cómo hacer la reparación
- Lo primero que debemos hacer para reparar fugas de agua es eliminar cualquier resto de agua de las tuberías. Para ello, cerraremos la válvula de la tubería y abriremos los grifos durante unos instantes.
- A continuación, y una vez detectado el punto exacto de la fuga, usaremos un trapo para secar la tubería al máximo. El siguiente paso es poner pegamento epóxido en la zona y caucho. Es necesario poner todo el material necesario para que la fuga quede completamente cubierta.
Con esto no conseguirás que la fuga esté completamente reparada. Falta algo más: necesitarás cubrir el caucho con un buen trozo de cinta adhesiva en el agua y colocar una abrazadera para que la fuga quede completamente sellada.
En el caso de que tengamos una fuga muy grande entre manos, este sistema de reparación no será suficiente. Necesitaremos sustituir la tubería rota por un trozo nuevo. Puedes encontrarlo en muchas ferreterías cercanas a tu hogar, así que no será problema. Cuando ya hayas drenado el agua de las tuberías, corta el pedazo adecuado y púlelo para poder colocarlo en la red. Si es una tubería de cobre, procede a soldarla. En cambio, los otros tipos de tubería necesitarán de una abrazadera para unirlas. Una vez colocada, ya podremos comprobar si el agua pasa correctamente por la tubería reparada.
Es importante que seas previsor a la hora de hacer una reparación de una fuga de agua. Si ves que no puedes usar las herramientas adecuadas para cortar la tubería dañada y reemplazarla por la nueva, será mejor que llames a un profesional especializado en fontanería, que te garantizará evitar complicaciones futuras al volver a usar el agua. En caso de averías graves, las reparaciones caseras deberían ser provisionales hasta que las atienda un profesional.
Los problemas de fontanería más habituales en el hogar
Descubre cuáles son las averías de fontanería más habituales en el hogar.
Existen una serie de averías de fontanería en el hogar que se repiten frecuentemente. A veces ocurren de forma inesperada. En otras ocasiones son desperfectos que van empeorando poco a poco con el tiempo. Aquí vamos a mostrarte cuáles son estos problemas de fontanería y explicarte cómo puedes solucionarlos tú mismo. Eso sí, si el asunto requiere de profesionales, existen empresas como Isurbide, con servicio 24 horas de fontaneros urgentes que lo arreglarán rápidamente sin que tengas que preocuparte de nada.
Muchas veces se observan atascos en los fregaderos de la cocina. El agua se queda estancada totalmente o pasa con lentitud por la tubería. Frecuentemente a este problema se le añade un terrible olor que desprende el desagüe. Este tipo de problema normalmente está causado por una acumulación de residuos por la limpieza de platos o el vertido de aceites de cocina. Si es un caso leve, normalmente se soluciona fácilmente dejando actuar bicarbonato junto a medio litro de agua muy caliente dentro de las tuberías. Si no funciona, otra solución es un desatascador manual. Colócalo en el desagüe, cubre con un poco de agua y realiza movimientos de arriba a abajo. Los desatascadores químicos que se venden en supermercados son muy útiles, pero son abrasivos con las tuberías. Por tanto, conviene evitarlos si es posible.
Los grifos que gotean habitualmente son sencillos de arreglar. Suele ocurrir cuando la junta se ha desgastado a causa del paso del tiempo. Es menos frecuente, pero también puede deberse a una instalación defectuosa. Sustituir la junta o ajustar el grifo con una llave suele ser suficiente.
Puedes notar que salen habitualmente residuos o impurezas de un grifo o que ha disminuido el caudal sustancialmente. Suele ser síntoma de que se han acumulado impurezas en el filtro o que este está en mal estado. Desenrosca la pieza que se encuentra en el extremo del grifo y procede a limpiarlos con un cepillo y agua. A veces está en tal mal estado que es necesario sustituir el filtro por otra pieza nueva.
También es relativamente habitual escuchar que el sistema de descarga del WC gotea. Normalmente se produce porque las juntas del mecanismo de la cisterna se han desgastado con el tiempo. Si el WC es nuevo es un indicio de que no se ha instalado correctamente o de que tiene un defecto de fabricación. En ocasiones es suficiente con desmontar el mecanismo y volver a ensamblarlo. Si continúa goteando será inevitable reemplazar el mecanismo de descarga.
Si quieres un resultado perfecto y no confías en que tú mismo puedas arreglarlo correctamente, o simplemente crees que el problemas puede ser grave, confía tus reparaciones a profesionales. No dudes en contactar con una empresa especializada que ofrezca un servicio de fontanería urgente. Además, así evitarás que muchas averías se conviertan en problemas graves y los solucionarás de forma rápida y efectiva.